¿Estás pensando en cambiar tu residencia fiscal de México a Estados Unidos? Aquí te presentamos algunas consideraciones clave.
La residencia fiscal conlleva reglas y obligaciones específicas en cada jurisdicción, pero en particular, implica declarar en el país de residencia los ingresos globales que recibe el individuo, independientemente de la fuente de dónde provengan. Cabe indicar que, en Estados Unidos, sus ciudadanos deben presentar su declaración anual considerando sus ingresos globales, sin importar si cuentan con residencia fiscal en otro país.
Es frecuente que empresarios, ejecutivos o inversionistas de nuestro país decidan probar suerte y mudarse a los Estados Unidos, gestionando la visa que se adapte a sus actividades. Para ello generalmente consultan a abogados migratorios que les orientan sobre la visa más adecuada para vivir legalmente en Estados Unidos, ya sea temporal o permanentemente.
En el caso de que una persona física, residente fiscal en México, decida migrar hacia los Estados Unidos, vivir legalmente en dicho país y realizar su actividad empresarial o profesional, debe tomar en cuenta las siguientes recomendaciones:
En primer lugar, es crucial entender cómo el sistema fiscal de Estados Unidos afectará su situación personal, incluyendo impuesto sobre la renta federal y probablemente estatal, así como impuestos sobre donaciones y eventualmente herencias. Además de que, cualquier ingreso obtenido en México o en cualquier parte del mundo, deberá ser incluido en su declaración en Estados Unidos al ser residente fiscal de dicho país.
A partir del cambio, los ingresos que reciba de fuente mexicana, se les dará el tratamiento de pagos a residentes en el extranjero, sujeto a diversas tasas de retención que, en ciertos casos, son elevadas.
Según el Artículo 9 del Código Fiscal de la Federación, se debe notificar al SAT el cambio de residencia fiscal dentro de los 15 días inmediatos anteriores a que suceda el cambio. El no presentar este aviso implica mantener la condición de residente en México y puede resultar en una multa de $6,780 a $13,560 pesos. Al cambiar la residencia fiscal como persona física, queda relevado de presentar la declaración anual, considerando los pagos provisionales realizados en el ejercicio, como definitivos.
Si bien es cierto existen diversos atractivos para tomar la decisión de migrar hacia los Estados Unidos, tales como la infraestructura de sus ciudades, la seguridad y tranquilidad personal y familiar, las oportunidades de negocio, el flujo comercial que se mueve en dicho país, el nivel de educación que existe en las escuelas públicas y privadas, también lo es que existen desventajas como el alto costo de vida, de la vivienda, de los seguros de auto, de salud y de vida entre otros.
Igual de importante es el impacto en el cambio cultural y estilo de vida pues la sociedad es drásticamente distinta a la de nuestro país, por lo que es menester entender que mudarse a un nuevo país implica ajustarse a una cultura y estilo de vida diferentes como el propio idioma, las costumbres, la idiosincrasia de la gente y el sistema educativo entre otros aspectos de la vida cotidiana.
Es esencial también considerar cómo afectará el cambio de residencia a tus planes de jubilación, patrimoniales y otros aspectos financieros a largo plazo.
Antes de tomar cualquier decisión, es fundamental investigar cada uno de estos aspectos y consultar con profesionales para entender completamente las implicaciones del cambio de residencia fiscal de México a Estados Unidos.
Para cualquier consulta adicional, no dudes en contactarnos. Estamos aquí para orientarte en este importante proceso de transición.
Atentamente
Mtro. Carlos Kim
Socio Director de Kim Gómez Franco ®
“El contenido de este boletín refleja la opinión personal del autor y tiene fines únicamente informativos. No debe interpretarse como asesoría legal, contable o financiera.”